Mental Fitness
Superando el Estrés: La Importancia del Propósito y la Resiliencia
Introducción
¿Qué te motiva a levantarte cada mañana? Para algunos, la razón es clara, mientras que otros aún la buscan. Encontrar este propósito requiere paciencia. Según un estudio de Einar H. Dyvik en febrero de 2024, más del 40% de las personas se sienten optimistas, mientras que el 60% vive guiado por el pesimismo.
¿Cómo te sientes: motivado u optimista, desmotivado o estresado?. Según Harvard Business Review, solo el 30% de las personas sienten que avanzan, mientras que el 70% se estanca, afectando su calidad de vida.
Vivimos rodeados de información negativa y retos que afectan nuestro cuerpo: provocando que glándulas secreten distintas sustancias. En exceso, dañan la salud, afectan la memoria y aumentan irritabilidad, insomnio y presión arterial. Aunque el estrés en pequeñas dosis es útil, el constante estado de alerta es dañino.
La clave para contrarrestar estos efectos es encontrar nuestro propósito, mantener la mente activa, cuidar el cuerpo y fomentar conexiones sociales saludables. La aptitud mental es tan importante como la física.
Mientras lees, procesas y recuerdas palabras al instante. Visualizar el tema e imaginar diálogos puede ser una excelente técnica de relajación. Aprender estimula la imaginación y activa diferentes partes del cerebro.
Según Bree Maloney de Marque Medical, el estrés moderado puede beneficiar la salud mental y física al aumentar el enfoque y el funcionamiento cognitivo. Eleva los niveles de cortisol y adrenalina, mejorando la atención. Además fortalece la resiliencia y el sentido de control, aumentando la confianza.
La gente con propósito es mas feliz. Este motor impulsa a seguir y fomenta hábitos saludables. Estudios muestran que tener un propósito claro prolonga la vida. Según el Dr. Howard Friedman y el Dr. Paige Braker, enfrentar desafíos y trabajar con dedicación añade años saludables a la vida.
Consejos para lograr una vida plena y saludable:
1. Busca tu propósito: Dedica tiempo a reflexionar sobre lo que te motiva y apasiona.
2. Mantén tu mente activa: Aprende cosas nuevas y desafíate.
3. Fomenta conexiones sociales: Únete a grupos con intereses comunes.
4. Maneja el estrés: Adopta una actitud de serenidad ante la dificultad y limita pensamientos negativos.
Conclusión
Antes de emprender un viaje de crecimiento, necesitas entender dónde estás parado para poder escoger el camino que mejor responda a tus necesidades y circunstancias.